Hoy descendemos por el mapa de Francia con el objetivo de visitar Burdeos.

Por el camino paramos a comer en Roullet de Saint Stephe, porque nos gustó mucho su área de ac el año pasado y está junto a la autovía.

Después de comer seguimos camino hacia Burdeos

Después de comer estuvimos jugando un rato en el parque que hay junto al área y echando palos al río.

Roullet se ha convertido en uno de nuestros puntos de paso obligatorios en nuestros viajes.

En burdeos aparcamos sin dificultad cerca de la explanada de Quinconces, donde está el monumento a los Girondinos.

Cerca del Gran teatro entramos en una oficina de turismo y ya plano en mano nos dedicamos a vagar por la ciudad.

Tras deambular un buen rato fuimos la zona de la Iglesia de San Pierre a tomar café y dulces.

Entre kilómetros, pateo por Burdeos y que ya estamos en el día 23 de viaje estamos un poco cansados.

Reanudamos la marcha y nos acercamos a la catedral de San Andrés.

Es una imponente catedral gótica.

Aunque a estas alturas de viaje ya hacemos fotos medio de cachondeo.

Tras verla continuamos nuestro paseo hacia el río Garona, atravesando la puerta Cailhau.

La puerta Cailhau fue construida en 1495 y está dedicada al rey Carlos VIII, defendía la ciudad de los ataques que se pudieran producir por el río Garona.

Tras verla llegamos al río Garona y lo observamos desde el Puente Pierre.

Volvemos sobre nuestros pasos y vemos como la gente se refresca en una fuente en la que se refleja el palacio de la Bourse.

El efecto se llama el espejo del agua, pero con el calor que hace lo que hace la gente es bañarse.

Debido a que en Burdeos no hay área, decidimos seguir viaje y camino hacía el sur. Al final encontramos una preciosa y tranquila área en el pueblo de Sauternes.

El sitio es un espectáculo debido a que está entre viñedos y bodegas.

Junto al área había un pequeño parque donde jugaron las niñas.

Y en este bucólico lugar terminamos la jornada.