Día 5. Puerto Hourquette D´Ancinan

Hemos pasado una noche muy tranquila. Despertarse en este entorno es una sensación única.

Poco a poco van llegando más autocaravanas y el prado se ha llenado.

Esto se ha convertido en una fiesta. Y nos llama la atención que pasan furgonetas vendiendo queso, chacinas y pan.

La gran mayoría de compañeros son franceses y vascos, todos vestidos de naranja, seguidores del Euskaltel.

Julia se ha hecho una amiga, se llama Ainoa y se pasa el día jugando y cazando renacuajos que meten en un bote.

La anécdota del día ha sido un hombre que ha perdido las llaves de su vw transporter y le hemos ayudado a abrirla, al final valió más maña que fuerza, como suele ser habitual.

Por lo demás el día es tranquilo, de descanso, hemos invertido el tiempo en leer y pasear.

La verdad es que hoy he echado de menos mi bici, para subir el Tourmalet que está cerca, pero no la llevé porque me da reparo llevar una bici cara 22 días por Francia y mi autocaravana no tiene garaje

Poco a poco iban llegando más autocaravanas
Poco a poco iban llegando más autocaravanas
Poder pernoctar en un sitio así solamente se puede hacer en autocaravana
Poder pernoctar en un sitio así solamente se puede hacer en autocaravana
Las ventanas azules de nuestra Viva Boss conjugan perfectamente con el cielo pirenaico
Las ventanas azules de nuestra Viva Boss conjugan perfectamente con el cielo pirenaico